DESCRIPCIÓN DEL ELEMENTO

a) Inmueble objeto de la declaración

El elemento objeto de esta ficha de catálogo incluye dos construcciones defensivas relacionadas, como son un paño de muralla, dispuesto en dos tramos, y un torreón de flanqueo de planta semicircular erigido entre ellos.

Forman parte ambas obras del extremo occidental del conjunto de fortificaciones que defiende el frente sur de la Almina de Ceuta. En esta zona el escarpe litoral pierde altura a medida que se acerca a Fuente Caballos. De este modo, estos elementos se pueden entender como un ámbito de transición entre ambos entornos, pasando de los bajos muros que apuntalan el acantilado sur a los poderosos baluartes que defienden la boca meridional del Foso Seco de la Almina.

b) Partes integrantes, pertenencias y accesorios

El monumento queda organizado mediante un torreón macizo de planta semicircular y muros ligeramente ataludados, que da nombre al conjunto, así como dos lienzos de muralla rematados con pretil que discurren tanto al este como al oeste de la torre, hasta entroncar con las fortificaciones de Fuente Caballos. La torre posee una altura máxima de 7,77 m y un frente de 6,85 m. El lienzo occidental posee dos tramos quebrados de 22,50 y 9,55 m de longitud respectiva, mientras que el oriental tiene 13,40 m de largo.

La plataforma cimera de la torre está descubierta, y conserva restos de una estructura de fábrica que deja un hueco en su centro. El conjunto se encuentra restaurado en fechas recientes, y aparece dotado de barandillas metálicas coronando los lienzos.  

Hacia el este existen una serie de muros de defensa, posiblemente coetáneos, que si bien no están incluidos dentro de la delimitación literal del BIC, quedarán insertos dentro del perímetro general de protección planteado en esta ficha de catálogo.

c) Descripción del entorno afectado

La construcción objeto de estudio se localiza en pleno borde litoral del frente sur de la Almina, en concreto en la playa conocida como de la Peña. Se trata de una zona incluida en el Dominio Público Marítimo Terrestre (Ley 22/88 de Costas), que a su vez se ve afectada por un área general de Interés para la Defensa Nacional (Ley 8/75).

La topografía es abrupta en esta zona, ya que dicha vía presenta una fuerte pendiente descendente de este a oeste. La línea de coronación de la muralla se adaptará a esta especial circunstancia del terreno.

Las obras de fortificación se desarrollan siguiendo la costa adaptándose al escarpe. A su pie existe un talud de tierra, recreado en fechas recientes, que cae hasta la playa rocosa. Sobre los muros defensivos se desarrolla la acera peatonal que sigue el curso de la Calle Santander, donde sufre un ensanchamiento para crear una pequeña área libre. No existen zonas de aparcamiento ni posibilidades de acceso rodado.

Cabe referir que no hay posibilidades de acceso a la playa desde la Calle Santander. De este modo, la muralla y torre se configuran a modo de límite o frontera entre ambos ámbitos, quedando definidos como muros de contención de tierras.

Las piezas residenciales que ofrecen fachada a la Calle Santander en este entorno son bajas, sin sobrepasar las dos plantas de altura. Cabe referir que dicha manzana se irá adaptando para recibir próximamente las nuevas construcciones en altura que empiezan a proliferar en el área próxima.

DATOS HISTÓRICOS-ARTÍSTICOS

a) Época de construcción 

En el grado actual de nuestros conocimientos es difícil precisar la fecha de construcción de estas obras. No existen referencias literarias específicas sobre la ejecución de estas defensas, al contrario que sucede con otras cercanas. De igual forma, apenas son referidas en las crónicas y reseñas históricas.

Por sus características formales y tipológicas podemos sugerir un origen anterior a las obras del siglo XVIII, al menos para la torre y el lienzo oriental. Dos son las hipótesis que planteamos en esta ficha de catálogo, que deberán ser refrendadas o desmentidas por la arqueología y estudios específicos:

1. Origen medieval islámico dada la similitud del Torreón de San Jerónimo con las torres de planta semicircular del recinto alto del Hacho (supuesta obra del siglo X).

2.Origen portugués (SS. XV-XVI).

En el entronque entre la torre y el lienzo occidental se observa una discontinuidad que bien podría señalar una etapa posterior para ese elemento, posiblemente coetáneo a la fortificación de Fuente Caballos a mediados del siglo XVIII. También se identifican obras de reconstrucción puntuales en el resto de elementos que se podrían relacionar con la refortificación citada del frente sur de la Almina.

b) Autor-constructor

Desconocido.

c) Tipología 

Torre de flanqueo de planta semicircular y perfil ligeramente ataludado, maciza y coronada por un pretil bajo. A ambos lados se desarrollan sendos paños de muralla de trazado quebrado para adaptarse a la topografía del lugar. Estos lienzos se rematarían con sencillos parapetos, sin que se conserve restos de merlatura, aspilleras, troneras u otros puntos de defensa específicos.

d) Función dentro del sistema defensivo 

Se construyó esta edificación con el objetivo de defender el frente sur de la Almina en su extremo occidental, en una zona donde el escarpe se torna menos abrupto y pierde sus condiciones de defensa natural. De este modo, la necesidad de proteger el entorno de Fuente Caballos hizo preciso prolongar la fortificación en fecha indeterminada hasta el torreón objeto de estudio, el cual flanquearía la línea del farallón en un punto donde éste realiza un quiebro apreciable.

e) Otros datos

No procede.

PRINCIPALES ETAPAS DE CONSTRUCCIÓN

Esta obra se puede entender como una construcción polifásica, fruto de diversas fases de obra y refuerzo. Como ya dijimos en un punto anterior, existen importantes dudas a propósito del origen concreto del torreón y sus lienzos aledaños. La hipótesis que planteamos en estas páginas será la siguiente:

Fase 1. Construcción del torreón y los lienzos aledaños, en un momento indeterminado (islámico o portugués de los siglos XV-XVI). Hemos de tener en cuenta que en fechas recientes se efectuó una excavación arqueológica por la empresa Arqueotectura S.L.L. al pie de estas estructuras, con motivo de diversas obras de infraestructuras, que dejó al descubierto restos de viviendas bajomedievales del arrabal de Enmedio edificadas extramuros al pie del cortado.

Fase 2. En torno a 1720 se ejecuta un parapeto entre el foso seco y la zona de San Jerónimo en la playa de la Peña. Esta obra podría ser, en el punto que estudiamos, una reforma de la construcción anterior ya existente. Así, se puede identificar con el parapeto que recrece ligeramente retranqueado el lienzo que discurre justo al este del torreón.

Fase 3. Posiblemente entre 1751 y 1757, coincidiendo con la fortificación del frente sur de la Almina, se podría haber reforzado el torreón colocando alguna pieza artillera sobre el mismo. No abundan las referencias sobre este respecto, y entre ellas destacamos la cita de Madoz (S. XIX) sobre diversas baterías de esta zona, entre las que refiere “San Gerónimo”. Las observaciones de los restos conservados permitirían relacionar los vestigios de la parte alta del torreón con esta utilización, si bien es difícil precisar el tipo de pieza instalada dado lo exiguo del espacio contenido en el terrado de la torre.

Fase 4. Existieron construcciones y chabolas adosadas a la torre hasta finales del siglo XX. Coincidiendo con la ejecución de obras de infraestructuras y reurbanización en esta zona de la Almina en 2005, se emprendieron obras de urbanización, colocando una barandilla sobre todo el perímetro superior y restituyendo el talud del pie de las estructuras. En 2006 se procedió a restaurar el torreón y los lienzos anexos.

ELEMENTOS CONSTRUCTIVOS, MATERIALES Y TÉCNICAS DE CONSTRUCCIÓN:

El Torreón de San Jerónimo y los lienzos de muralla cercanos se construyeron en su origen con una técnica constructiva similar. Para ello se empleó mampostería careada de módulo diverso, que tiende a seguir hiladas pero con escasa regularidad. Las piezas se toman con mortero de cal y acostumbran a estar calzadas con ladrillos y ripios y cantos. Desconocemos la anchura o profundidad de los muros, al servir como muros de contención tierras y estar el trasdós oculto. Este aparejo se caracteriza por la presencia de diversos mechinales en su superficie, con la intención de servir de puntos de drenaje.

No se aprecia zapata o zarpa que sirva de cimentación. Estas fábricas se recubren de forma general con un fino enlucido de cal, que en ocasiones crea vitolas alrededor de los mampuestos.

El pretil recrecido que vemos en el lienzo oriental, y que suponemos obra del siglo XVIII, sigue un concepto constructivo similar a la obra primitiva. También en la obra de reforma de la terraza de la torre vemos un núcleo de mampostería similar, completado por ladrillos que refuerzan bordes y esquinas.

Con respecto a las obras de restauración acometidas hace menos de una década, en ellas se emplearon materiales de similar factura a los originales. Destaca no obstante, por su gran impacto visual, la reconstrucción del muy dañado lienzo occidental, que se forró completamente con un aplacado muy regular de arenisca de tipo ferruginoso. El borde superior se protegió con una barandilla tubular metálica que apoya sobre un nuevo parapeto de fábrica rematado con albardillas.

BIBLIOGRAFÍA

No existe bibliografía específica sobre esta obra de la Almina, siendo una importante ausencia que habría que resolver en futuros estudios historiográficos.