Baluarte de San Carlos

Calle Deán Navarro Acuña

Ref. catastral: 1440033TE9714S0001HI

Información extraída del Plan Especial de Protección de Conjunto Histórico de las Fortificaciones del Recinto de la Almina (autores: Gurriarán Daza, García Villalobos, Pascual Origosa, Muñoz Marín)

Ingeniero: Desconocido

Descripción del  Inmueble objeto de la declaración

La construcción objeto de atención en esta ficha del Catálogo es un baluarte localizado en el tramo oeste de las murallas del recinto de la Almina de Ceuta, así como el tramo de muralla ataludada que lo une con el cercano Baluarte de San José al oeste y un paño oculto que comunica con la Batería de Fuente Caballos al este.

Este tramo en su conjunto cierra el frente perimetral existente entre la puerta de Fuente de Caballos y el puente de la Almina, de ahí que tuviera gran valor estratégico

El baluarte de San Carlos forma parte de un conjunto de fortificaciones que se levantan a pie de mar en la Playa de la Ribera, y se organiza alrededor de una antigua fuente conocida como Fuente Caballos. El trazado de la fortificación discurre hacia el sur hasta el foso seco de la Almina, y esta flanqueado por los baluartes de San Carlos al este y San José al oeste. Estaría íntimamente relacionado con el conjunto defensivo occidental del citado foso, ya que protegería una de las puertas de salida del foso hacia el sur conocido como puerta del boquete de la Sardina.

El Baluarte de San Carlos  limita al noreste con la calle Deán Navarro Acuña, al suroeste con la Playa de la Ribera, al sureste con lienzo de muralla que discurre hasta la puerta de fuente de Caballos y al noreste con el lienzo de muralla que lo une con el baluarte de San José. 

El sistema defensivo de San Carlos estaba formado en su origen por lienzos de muralla ataludada que se quiebran en puntos estratégicos para formar un gran baluarte atronerado, con zonas de vigilancia específica donde se ubicaban garitas. En su trasera se erigieron una serie de espaldones.

El baluarte de San Carlos tiene una longitud total de 52 m y se adelanta sobre el lienzo del lado sur 9 m y sobre el lienzo situado al norte del baluarte 14 m.

Según el historiador Alejandro Correa, el desarrollo de la fortificación del recinto de la Almina fue en 1.720 por los sectores oeste y sur mediante un parapeto desde el Agujero de la Sardina a la playa de San Jerónimo (hoy conocida como de la Peña). 

Se arruinaron pronto, con lo que en 1.751 estos frentes fueron remodelados construyéndose los baluartes de San José y de San Carlos, así como la muralla que enlazaba el frente occidental del baluarte de San Sebastián con la Puerta de Fuente Caballos y el Torreón de San Jerónimo. 

b)Partes integrantes, pertenencias y accesorios

En la cartografía consultada en el Archivo Central de Ceuta “Plano y perfil del frente de la Almina” por Carlos Luján (1751) se representa el sistema defensivo en el lindero oeste del recinto de la Almina, “Plano del Frente de la Puerta de la Almina que comprende el terreno desde el Palacio a Fuente Cavallos, en donde se demuestra por el perfil el corte de las tierras que se debe ejecutar para su defensa por esta parte”

Los elementos defensivos que se representan en esta planimetría es el trazado de la muralla ataludada, la definición en planta de la geometría de los dos baluartes, el de San José y el de San Carlos, con los trazados de los lienzos de muralla que los unen con el foso de la Almina, hasta el Baluarte de San Sebastián y su unión con la puerta del Boquete de la Sardina. Se representa una sección transversal del lienzo de muralla, entre el baluarte de San José y el de San Carlos, definiendo la ejecución del muro, en sus fases de excavación y la formación de un espaldón paralelo al trazado de la muralla que protegía la zona de la Almina tierra adentro.

También se identifican en la planimetría las troneras, situadas en los alzados de los lienzos al sur y oeste de los baluartes, orientadas hacia la puerta del Boquete de la Sardina y la playa de la Ribera. Se representa  en la planimetría la posición de las garitas en las esquinas de los dos baluartes.

Durante el gobierno del teniente General de Croix 1751-1754, el gobernador mandó levantar varios espaldones y plantar espesas alamedas en la zona oeste de la ciudad, aunque no se han conservado hasta  la actualidad.

En la planimetría de 1799 “Plano de una porción de la muralla del sur, que comprende desde Fuente-Caballos hasta el Espigón de la Rivera” del autor Juan Bautista de Jáuregui, se representa en planta alzados y secciones del sistema defensivo del Oeste de la fortificación, comprendido por los Baluartes de San José y San Carlos, desde la bajada a la playa por Fuente de Caballos hasta el boquete de la sardina.

Se define en la planimetría el alzado de los lienzos de muralla, la posición de las troneras y las garitas en ambos baluartes, así como la existencia del adarve. Se trata de una muralla ataludada de sección variable, rematada por una imposta o cordón magistral y un último cuerpo constituido por el parapeto donde se representan las troneras. 

En la sección transversal M-N realizada por el tramo de muralla entre los dos baluartes el de San José y San Carlos se identifica un doble muro que discurre paralelo al trazado de la muralla, para la contención de tierras y la formación de un espaldón, que serviría para la protección de los campos de los ataques por el límite oeste de la fortificación.

El sistema defensivo al que pertenece el baluarte de San Carlos tiene una longitud total de 240 m de desarrollo desde la puerta de Fuente de Caballos, situada en el extremo mas al sur y la puerta del Boquete de la Sardina, situada en su extremo norte, coincidiendo con la salida a la playa desde el foso seco, salvando un  desnivel de 14 metros desde la rasante desde la calle Deán Navarro Acuña hasta la playa de la Ribera, donde se apoya directamente el lienzo de muralla en su trazado oeste.

Referente a las alturas de la muralla va aumentando su alzado desde la zona de fuente de Caballos, donde el alzado de lienzo es de 3.00 m aproximadamente hasta el Boquete de la Sardina, donde encontramos los lienzos de mayor altura 13.00 m, coincidiendo con el baluarte de San José en su encuentro con el muro de la Puerta de La Sardina.

En este tramo es donde se ubica el elemento que tratamos en esta ficha del catálogo, y que se compone de una muralla ataludada que configura un baluarte de trazado trapezoidal y un paño que lo une con el cercano de San José. 

En la actualidad está en buen estado de conservación. Se construye con mampostería careada parcialmente revestida, tiene una altura media de 14 metros y la mayor parte de su trazado es visible.

Se puede hacer una lectura sencilla de sus partes integrantes. De este modo, la muralla ataludada que forma el elemento defensivo en este tramo se compone de un lienzo principal de mampostería irregular, rematado con una imposta o cordón magistral sobre el que se alzaba el parapeto. En la actualidad la obra militar se remata con pretiles, barandillas y obras diversas de origen reciente, que desvirtúan el perfil superior del elemento. En su base, con una altura prácticamente de dos terceras partes,  y en contacto con el litoral, existe un refuerzo o alambor de mampostería irregular cubierta en parte por mortero de cemento, en algunos puntos de hasta 30 cm. de grosor con que se recubre la superficie de la mampostería original de la muralla, para consolidar la base deteriorada por la erosión por el contacto directo con el litoral.

Se conservan en sus dos esquinas exteriores partes de sendas garitas de guardia. La garita de la esquina situada más al Oeste es de forma semicircular y se apoya en la muralla en ménsula. El material empleado para su ejecución es ladrillo aparejado de forma irregular, apoyado sobre una pieza semiesférica empotrada en ménsula en la esquina del baluarte y de piedra similar a la utilizada en la mampostería del lienzo de muralla. El cordón magistral se conserva prácticamente en todo el perímetro del baluarte y continúa por el perímetro de la base de la garita. El cordón magistral se interrumpe en la esquina Este, por un recrecido de muro de ladrillo que se apoya sobre la muralla de mampostería, formando la esquina.

En la esquina Este del baluarte de San Carlos se identifica otra garita de vigilancia, esta es de forma cilíndrica, se conserva parte del alzado de muro de ladrillo de la garita, con una altura de un metro y medio aproximadamente. La base de la garita está formada por dos piedras superpuestas, talladas en forma cilíndrica, y empotradas en ménsula en la esquina del muro del baluarte. Entre las bases de piedra y el arranque del muro de ladrillo aparece una hilada de ladrillo colocado a sardinel, igual que el cordón magistral existente, pero con un trazado a cota superior.

En la planimetría histórica consultada en los archivos, se definen otros elementos constructivos como son las troneras y el adarve, pero en la actualidad no se conservan en esta parte de la fortificación. De este modo, en la coronación del pretil no se identifican las troneras, y se han construido sobre ellas otras barandillas y construcciones.

El trazado del adarve también ha desaparecido, bajo rellenos posteriores al siglo XVIII y diversas edificaciones del actual cuartel de la Legión.

En la zona que pertenecía al adarve, entre los pretiles de coronación de la muralla y los muros paralelos construidos para la formación de los espaldones, actualmente se encuentran las edificaciones destinadas a uso militar, pertenecen a las instalaciones del cuartel de la Legión.

En la zona Este del baluarte, y adosado en parte al pretil de coronación de la muralla se coloca la edificación del casinillo de la legión. Existen edificaciones adosadas entre el edificio del casino y la muralla, se identifican a simple vista como ampliaciones del edificio.

Las murallas de la fortificación se encuentran en varios puntos atravesadas, o  se adosan en su superficie, por instalaciones de saneamiento de las edificaciones alojadas en la zona de intramuros.

Se identifica un muro adosado a continuación del baluarte de San Carlos por su lindero Este, que arranca su base desde la playa y tiene un trazado en paralelo al lienzo de muralla del siglo XVIII. Dicho trazado no se identifica en los planos de la época, anteriormente descritos. En la planimetría histórica de esa época el límite del baluarte de San Carlos coincide con las esquinas donde se ubican las garitas de guardia.

Por último, y a la hora de hablar de los restos constructivos del siglo XVIII conservados, debajo del Casinillo de la Legión existen varias estructuras que podría tener un origen coetáneo al baluarte. Nos estamos refiriendo a sendas estancias cubiertas por bóvedas de medio cañón, del tipo a prueba de bombas.

Este muro adosado, crea una plataforma intermedia conformando uno de los patios del actual cuartel de la Legión y es donde se ubica una posible torre medieval de planta cuadrada. Este elemento se conecta a la muralla del recinto de la Almina por un muro en el que se abre una puerta tapiada dotada de alfiz.

Es difícil precisar en el estado actual de nuestros conocimientos el origen de este singular elemento, que por su tipología bien pudiera responder a un interesante vestigio de la fortificación medieval de la Almina. En efecto, un reconocimiento rápido sus sugiere encontrarnos ante un postigo de la muralla, flanqueado hacia el este por una torre defensiva. El acceso se organiza mediante un vano con arco de medio punto tapiado, dotado de alfiz. Se construye su rosca y el alfiz con ladrillo y el resto del paramento con mampostería muy retocada. Mientras, la torre es hueca y se organiza en dos plantas dotadas de ventanas, con acceso por la inferior. Al exterior se remata con una imposta en la separación entre los dos niveles, y otra coronando el pretil cimero, donde se alzan merlones dotados de albardillas piramidales. Las plantas se separan por forjados de reciente factura, con estructura metálica.

Como hipótesis, y hasta que estudios concienzudos de tipo arqueológico no aporten nuevos datos, es posible considerar la puerta como de posible origen medieval, mientras que la torre aledaña podría ser en su origen coetánea, sin embargo ha sufrido transformaciones recientes de tal envergadura que más parecen responder a un historicismo arquitectónico.

Descripción del entorno afectado

El baluarte de San Carlos forma parte del conjunto de fortificaciones que se levantan a pie de mar en la Playa de la Ribera, el trazado de la fortificación discurre hacia el oeste desde la puerta de Fuente de Caballos hasta el foso seco de la Almina, paralelo a la traza de la calle Deán Navarro Acuña y la calle Santander, en el tramo comprendido desde la calle teniente José Olmo hasta la calle Velarde. La rasante del vial que limita al norte con el elemento defensivo tiene una pendiente prácticamente constante, a una cota de 15 m sobre el nivel del mar.

El conjunto de fortificaciones salva un desnivel de 15 m desde la playa de la Ribera hasta la cota del vial, en su lindero norte, formando dos plataformas de cotas intermedias entre la muralla y el vial.

Una primera plataforma coincide con las cotas de coronación de la muralla, con una altura media de 13 m, en un nivel intermedio se sitúa una segunda plataforma, con una cota de 2 m bajo la rasante del vial.

El baluarte se San Carlos se sitúa entre calle Padilla y Calle Ingenieros. El desnivel desde calle Padilla hasta la base del muro en la playa es en el punto medio del baluarte es de 15 m, y la cota de  coronación del muro es de 13 m, coincidiendo con el nivel mas bajo del patio situado entre la muralla y la calle Deán Navarro Acuña. El siguiente nivel del patio es de 14.50 m aproximadamente y se sitúa en la mitad sur del elemento. En esta terraza es donde se ubica el edificio del casinillo de la Legión.

Existe un acceso a la playa de la Ribera con un primer tramo de escaleras y la parte final en rampa, de trazado paralelo al vial que desciende desde Fuente de Caballos hasta la Playa, entre el trazado de la muralla y la calle Deán Navarro Acuña, salvando un desnivel de 14 m. Actualmente la puerta de salida por este pasaje esta cerrada al público.

Hoy día la superficie de las plataformas entre la muralla del límite oeste y el vial de la calle Deán Navarro Acuña está ocupada por edificaciones destinadas a instalaciones militares de la Legión. El acceso a esta área se realiza desde la cota de la calle. 

Como elementos significativos encontramos en el patio del baluarte de San Carlos el edificio del Casinillo actualmente protegida por el Plan General, y la torre de origen medieval. En la zona intermedia a los baluartes existe un edificio destinado a museo de La Legión. Situados en el patio del baluarte de San José se ubican los pabellones destinados a uso residencial del cuartel.

Existe una salida por la zona oeste, pasando por debajo del vial de la calle Deán Navarro Acuña, limitando con la curva conocida como curva  del Plátano hacia la calle Teniente Olmos, coincidiendo su prolongación con la traza de la contraescarpa del foso.

Los objetivos de la intervención en esta zona son la recuperación del baluarte en su conjunto, como obra patrimonial de alto valor histórico, creando un espacio urbano de alta calidad ambiental, donde quedaría inserta la puerta y torre medieval.

Por su posición estratégica la recuperación de las áreas libres de los baluartes posibilitaría la apertura de visuales hacia el mar desde la ciudad, ya que lo convierten en un mirador de la bahía Sur del litoral Ceutí. Actualmente estas vistas están tapiadas por los cerramientos de las instalaciones del cuartel de La Legión por la calle Santander y Deán Navarro Acuña.

Además, este sector del conjunto de las fortificaciones de la Almina sirve de fondo visual desde la playa de Ribera, que es desde donde se contempla una de las partes más monumentales y pintorescas de la fortificación ceutí.

1) Accesos

- Tipo: Viario público de acceso peatonal.

- Identificación: Calle Deán Navarro Acuña.

- Localización: Inserto en el casco urbano del barrio de la Almina, en el límite Oeste de la fortificación.

- Notas: 

2) Situación

El sistema defensivo se levanta sobre la playa de la Ribera, definiendo el extremo oeste del recinto de la Almina, salvando el desnivel desde su base hasta la rasante del vial que lo limita al norte, siguiendo el trazado de la calle Deán Navarro Acuña, entre las calles Padilla e Ingenieros. 

3) Visitable

ACCESIBLE VISITABLE

SI X SI

NO NO X

d) Bienes muebles que comprende y constituyen parte esencial de su historia

En el muro de unión entre los baluartes de San José y San Carlos, a media altura, se haya situada una lápida rectangular que conmemora su construcción. La lectura de la misma no ha sido posible dado el deterioro de su superficie y la baja incisión del texto.

e) Afecciones jurídico-administrativas

1.- Urbanísticas:

• Normativa urbanística en vigor: Plan General de Ordenación Urbana.

• Aprobación: 1992.

• Tipo de suelo: Urbano

• Protección y normativa arqueológica:

NIVEL PROTECCIÓN 1

NIVEL PROTECCIÓN 2 X

2.- Patrimoniales específicas:

• De forma genérica, el elemento se encuentra amparado por el Decreto de 22 de abril de 1949, expedido por el Ministerio de Educación Nacional (B.O.E. 5-5-1949), sobre protección de los castillos españoles, recogido luego de forma genérica como BIC por la Ley 16/1985 del Patrimonio Histórico Español. Figura en su conjunto y de forma individual en el anexo de la Resolución de fecha 7 de enero de 1998 de la Subdirección General de Protección de Patrimonio Histórico de la Dirección General de Bellas Artes y Bienes Culturales del Ministerio de Educación y Cultura, por el que quedan inscritas en el Registro General de Bienes de Interés Cultural del Patrimonio Histórico Español.

3.- Otras:

• Zona de servidumbre. Ley 22/88 de Costas.

DATOS HISTÓRICOS-ARTÍSTICOS:

a) Época de construcción

Las obras de construcción de esta muralla tienen su antecedente en el año 1720 donde se levantó el parapeto que va desde el Boquete de la Sardina hasta la Playa  de San Jerónimo. En 1751 Se construyeron los baluartes de San José y San Carlos y una muralla que enlazaba el flanco occidental del baluarte de San Sebastián con la Puerta de Fuente de Caballos y el torreón de San Jerónimo.

b) Autor-constructor

Aunque no podemos conocer con exactitud los autores directos de esta construcción, sí sabemos que la iniciativa de fortalecer el recinto de la Almina surge a partir de que el Gobernador D. Luis Rigio, Príncipe de Campo Florido, puso en estado de defensa todo el litoral de la Almina y del monte Hacho en el año 1.720, como consecuencia del largo sitio a que fue sometida Ceuta por la artillería marroquí entre 1694 y 1727. A partir de este momento la fortificación se irá realizando bajo el encargo de distintos gobernadores.

Durante el gobierno del teniente General de Croix 1751-1754, el gobernador mandó levantar varios espaldones y plantar espesas alamedas en la zona oeste de la ciudad, aunque no se han conservado hasta  la actualidad.

c) Tipología 

Construcción defensiva integrada en un sistema abaluartado, configurada como un simple baluarte formado por lienzos de muralla ataludados, rematado por cordón magistral y parapeto con troneras. Se ubican garitas en las esquinas como zona de vigilancia.

La base del lienzo sur, que mira a la costa, posee un importante refuerzo o forro a modo de alambor, mucho más inclinado que el resto del lienzo.

d) Función dentro del sistema defensivo

Defensa del frente occidental del recinto de la Almina en su entronque con el Foso Seco que lo separaba del recinto de la Ciudad. Protegería una de las puertas de salida del foso hacia el sur, conocido como puerta del Boquete de la Sardina, la salida del recinto amurallado por la puerta de Fuente Caballos, así como el litoral de esta zona de la bahía Sur.

e) Otros datos

No procede.

PRINCIPALES ETAPAS DE CONSTRUCCIÓN:

En 1720 se levantó un primer parapeto que iba desde el Boquete de la Sardina hasta la Playa  de San Jerónimo. En 1751 Se construyeron los baluartes de San José y San Carlos y una muralla que enlazaba el flanco occidental del baluarte de San Sebastián con la Puerta de Fuente de Caballos y el torreón de San Jerónimo.

Es posible que el refuerzo o alambor de la base del baluarte sea una obra no mucho posterior a su construcción, o incluso coetáneo, aunque en cualquier caso se descarta su origen reciente.

En el siglo XX se ejecutaron distintas obras, una vez perdida la finalidad militar de estas construcciones, con la ejecución de los edificios destinados a las instalaciones del cuartel de La Legión, actualmente en uso por el Tercio “Duque de Alba” II de La Legión. Las actuaciones desarrolladas desde entonces han desvirtuado la silueta del baluarte, desmontando gran parte de sus estructuras y edificado sobre lo conservado nuevas obras. 

Se ha realizado un muro de contención en forma de L que se adosa al baluarte de San Carlos por su muralla sur, creando una plataforma delante de la torre y la puerta de origen medieval. Es una solución mimética, que puede dar a confusiones de interpretación entre las partes de elementos de origen militar del siglo XVIII y la ampliación del siglo XX.

Además, se han colocado con profusión pretiles, barandillas y otros elementos que montan sobre el muro defensivo. 

ELEMENTOS CONSTRUCTIVOS, MATERIALES Y TÉCNICAS DE CONSTRUCCIÓN:

Por los datos que aporta la documentación histórica y los elementos constructivos que se conservan hoy día, sabemos que la construcción de estos elementos defensivos consistía en la ejecución de un elemento masivo elevado con mampostería careada de gran tamaño tomada con mortero calizo, que tiende a seguir hiladas, aunque en algunos puntos el aparejo se vuelve más grosero e incluye con profusión ladrillos y ripios de forma desordenada. El conjunto se protegía de forma conveniente con un fino enlucido de mortero de cal, dejando al descubierto la cara central de los mampuestos, a modo de vitola. El ladrillo se utiliza de forma accesoria en la construcción del cordón magistral, puesto de plano. El material empleado para la ejecución de los muros de las garitas situadas en las esquinas del baluarte es de ladrillo aparejado de forma irregular, apoyado sobre una pieza semiesférica empotrada en ménsula en las esquinas del baluarte. 

Desconocemos cómo se resolvía la cimentación, ya que no es visible en ningún punto. Hay que tener en cuenta que el trasdós del muro sirve para contener tierras. La obra se remata con un cordón magistral sobre el que se alza el parapeto, de 2,00 m de altura máxima conservada en algunos puntos. 

7.- BIBLIOGRAFÍA:

La bibliografía específica que existe sobre esta construcción es escasa, apareciendo la mayor parte de las veces en referencias incluidas dentro de obras de síntesis sobre las fortificaciones de Ceuta. De forma general, podemos reseñar las siguientes referencias:

RUIZ OLIVA, J. A., Fortificaciones militares de Ceuta: siglos XVI al XVIII, Ceuta, 2002.